...Sigo soñando contigo...

Me abandonaste, pero cuando decidiste volver te acogí con los brazos abiertos. Poco tiempo después te volviste a ir, y te esperé. Te esperé hasta que quisiste volver. De nuevo ocupaste mi cabeza, haciéndome buscar en lo más profundo de mi corazón. Pero te marchaste de nuevo... "La última vez", me dije. "Si te vas, no vuelvas" pensé en decirte, pero no lo hice.

Mucho tiempo me dejaste sólo, o quizás no tanto, pero el suficiente para creer que no te echaba de menos, que no te necesitaba... pero no era así. Te buscaba en cada esquina. Un sentimiento vacío llenó el hueco de tu ausencia. Durante un tiempo busqué con qué sustituirte, y cuando creí ya no necesitarte, cuando pensaba que había conseguido suplantarte y que no iba a necesitarte más, me di cuenta de que te necesitaba más que nunca.

Me volví a quedar solo, sentado, mirando al techo, esperándote de nuevo. Lloré de desesperación tu larga ausencia, recé sin descanso pidiendo tu vuelta, grité sin razón tu nombre durante horas, días, meses... pero de nada servía , ya no volverías. Perra dama inalcanzable, que me quitas el sueño y la vida, vuelve. Vuelve y quédate conmigo por siempre, pues sin ti no soy nada, inspiración.