domingo, 8 de noviembre de 2020

...Ternura con intereses...

 

Un te quiero mudo.

Una veintena de casis.

Amor demasiado puro.

Un nada en un oasis.

 

Catarsis de murallas derrumbadas.

Calles que vigilan amantes clandestinos.

Testigos son sus piedras calladas,

sin más afrodisíaco que unos vinos.

 

Caminos de frío olvidado.

Silbidos de viento por melodía.

Amanece el tiempo pasado,

cuando cualquier excusa servía.

 

Sólo recuerdo su culpa;

olvidé todo lo demás.

Dejé de creer en los nunca

y me prometí a los tu sabrás.

 

¿Qué son los para siempre,

sino una rendición anticipada?

Tenía razón septiembre,

pero negarlo me flipaba.


No hay comentarios: